La pubertad es el espacio de tiempo en el que aparecen los caracteres sexuales secundarios. La edad de la pubertad oscila entre los 8 y 16 años, en los primeros tiempos no es raro que haya ciclos en los que no hay ovulación y la menstruación puede no ser regular.
Generalmente aparece el llamado “estirón” o crecimiento puberal que se produce uno o dos años antes y puede alcanzar los 11cm. anuales. Este suele ser el primer signo de pubertad, seguido de la aparición del botón mamario. Se agrandan los pezones, se desarrolla la mama y habitualmente, aunque no siempre, aparece el vello axilar y púbico.
La aparición de la regla (Menarquia) suele ser el último acontecimiento de la pubertad. Es en esta etapa de la vida donde hay que “informar” y “educar” en los hábitos higiénicos básicos de la mujer en lo que respecta a la menstruación y a aspectos vinculados con un posible inicio en la sexualidad, la prevención de enfermedades de transmisión sexual, métodos anticonceptivos etc.
Es la aparición de algunos caracteres sexuales secundarios antes de los 8 años y sus causas pueden ser muy variadas, desde una alteración cromosómica de la niña, tumores de ovario productores de hormonas, tumores cerebrales, alteraciones en el funcionamiento del tiroides…
El tratamiento además de ir dirigido a las causas, tiene como objetivo evitar el retraso de crecimiento que acompaña a la pubertad precoz y así conseguir la máxima talla de la niña en la edad adulta.
Es la ausencia de caracteres secundarios o menstruación, entre los 16 y los 18 años. Puede estar ocasionada por malformaciones cromosómicas, malformaciones anatómicas, tumoraciones hipofisarias, transtornos hormonales, etc. El tratamiento debe ir dirigido a identificar la causa y tratarla.